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Etapa 5. Molinaseca - Villafranca del Bierzo (30,7 Km.) |
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13-04-2008. Domingo. Tras desayunar en un hotel próximo al albergue salimos de Molinaseca bajo un cielo gris que amenaza lluvia. El Camino transita por la acera junto a la carretera que lleva a Ponferrada, pero poco antes de llegar se abandona tomando un camino a la izquierda.
Hacemos una pequeña circunvalación a Ponferrada pasando por Campo hasta que entramos en la ciudad por un puente de piedra, momento en el cuál comienza a llover. |
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Entrando en Ponferrada |
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Pasamos junto al emblenático castillo templario bajo una lluvia aún más intensa y nos deviamos de las marcas del Camino para buscar una farmacia y un cajero.
En lugar de pasar por Columbrianos y Fuentes Nuevas como marcan las flechas, nosotros continuamos por una larga avenida hasta Camponaraya dónde retomamos de nuevo el Camino original. Aquí hacemos un descanso para almorzar pues llueve con fuerza. |
Castillo de Ponferrada |
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Tras dejar de llover salimos de Camponaraya tomando un camino que cruza la autovía y atravesando campos de cultivo nos deja en Cacabelos. A la salida de ésta localidad transitamos ahora por carretera, la cuál se empina mientras de nuevo comienza a llover con fuerza. Tras unos kilómetros de continuo sube y baja con las rodillas resentidas, abandonamos la carretera para tomar un camino a la derecha que tras una fuerte y sufrida subida bajo la abundante lluvia nos deja en Villafranca del Bierzo. |
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Camino de Cacabelos |
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Éste último tramo, a pesar de la lluvia nos deja en la retina un hermoso paisaje de suaves lomas plagadas de viñedos.
Nada más entrar en el pueblo nos topamos con el albergue municipal dónde nos alojan en una grande y fría habitación llena de viejas literas. Debido a la hora, nos quedamos sin comer botillo y los comercios están cerrados, pues es Domingo. Pero el propietario de una tienda nos abre y podemos comprar algo para comer y cenar. |
Villafranca del Bierzo |
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En la cena conocimos y charlamos con unos navarros que habían comenzado hoy en Ponferrada. Tras secar la ropa al calor de la chimenea nos retiramos a descansar, algo necesario para afrontar mañana la dura subida a O Cebreiro. |
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